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Quizá con el aumento del parque automotriz, quizá tras las urgencias del terremoto, quizá sólo porque somos así (tan especiales), de un tiempo a esta parte los chilenos nos hemos acostumbrado a estacionar como nos da la gana, sin importarnos a quien podamos fastidiar.
Esto es lo que ocurre en un complejo de torres de la comuna de La Florida, en Santiago, donde un vecino que se niega a arrendar un estacionamiento para su vehículo suele dejarlo en el acceso de uno de los edificios, pese a las señales de “No Estacionar” y estar junto al lugar donde se deja la basura para su retiro.
Según nos contó un usuario de BioBioChile -quien pidió reserva de su identidad- el vecino aludido resultó ser tan indiferente a la vida en comunidad, que ni siquiera atendió la solicitud de los conserjes de dejar su auto donde no estorbara la extracción de los desechos.
Pero tanto va el cántaro al agua que este acaba por romperse. Este fin de semana, con cientos de cajas y tarros que apilar debido a la apertura de una nueva torre, a los conserjes, personal de aseo y otros vecinos no les quedó otra que poner la basura donde se pudiera: alrededor y sobre el mismo vehículo.
Así que ya lo sabes. Si eres de los que les da lo mismo la opinión de tus vecinos, ten cuidado. Podrían caerte encima, literalmente.
biobiochile.cl