El pasado 3 de mayo fui mencionada en una publicación de CIPER que informó sobre licitaciones en La Pintana adjudicadas a la Agencia Técnica Educativa (ATE) Audigeduc y que involucran un millonario desembolso de recursos destinados a mejorar la educación de alumnos vulnerables (vea aquí ese reportaje).
De acuerdo con los antecedentes expuestos por CIPER, Audigeduc participó en estos procesos de licitación presentando información adulterada. En particular, presentó un equipo de profesionales con post grado que no han participado en estas asesorías para La Pintana. En esa nómina de profesionales figuraba mi nombre.
Al respecto, solicito a CIPER que publique la carta que remití al propietario de la ATE Audigeduc,Miguel Ángel Ortega Aguirre, en la cual establezco que no fui consultada ni tuve participación alguna en las dos licitaciones mencionadas en el reportaje.
Dejo constancia que solicité a la aludida ATE una respuesta formal y un pronunciamiento público acerca de que no he tenido vínculo alguno con estas asesorías en La Pintana, lo que no ha ocurrido hasta el día de hoy, razón por la cual he decidido hacer pública esta carta. Asimismo, estoy disponible para aportar con mi testimonio a objeto de evitar que hechos como estos se repitan y para que se instalen prácticas transparentes y honestas, como son aquellas que he adoptado como norma de vida.
Señor
Miguel
Ortega Aguirre
Consultora Auditorías y
Gestión Educativa (Audigeuc)
Presente
Como usted sabe, el Centro de Investigación Periodística (CIPER) publicó el día 3 de mayo pasado el artículo “La Pintana paga $1.471 millones de fondos SEP a consultora que ganó licitación con datos adulterados”. Para mi sorpresa, entre los profesionales utilizados para ganar la licitación se encuentra quien suscribe la presente carta.
En relación a estos hechos, le manifiesto mi rechazo a tan nefasta práctica, reñida con la más mínima ética, y le expreso mi indignación por el abuso de usar mi nombre, profesión, post grado y experiencia profesional, para ganar licitaciones de modo engañoso en los años 2014 y 2016.
Señor Ortega, usted bien sabe que jamás me consultó al respecto ni menos se solicitó mi participación en dichas licitaciones, lo que se refrenda por el hecho que nunca he estado en esa comuna, nunca he visitado sus escuelas y nunca me he entrevistado con profesionales de su Departamento de Educación como integrante de algún equipo de profesionales de su consultora.
Ante estos deplorables acontecimientos, solicito a usted reconocer públicamente que no tuve participación en estos hechos, como, asimismo, reconocer el abuso indebido de documentación de carácter técnico, profesional y personal.
Le reitero mi profunda decepción y dolor por haber sido involucrada en un hecho tan irritante y alejado del espíritu que conlleva la Ley 20.248 (que estableció la Subvención Escolar Preferencial a favor de los alumnos más vulnerables), e indicarle, a su vez, que me reservo el derecho a iniciar acciones legales, si usted no aclara públicamente los hechos ya mencionados.
Margarita Traverso Carvajal